Y ya iba siendo hora. Porque los progres legislan y los demás sufrimos el resultado de su delirio progre-buen-rollista.
Ellos abren las puertas a la inmigración masiva y los demás sufrimos las consecuencias.
Ellos practican el buen rollismo con los gorilas del Nigeria, los homosexuales de Burundi y nosotros...pagamos (literalmente). Qué bonita la "solidaridad" con el dinero de los demás.
Ellos legislan leyes contra "las violencias de géneros". Y los demás, los hombres en este caso, perdemos un derecho fundamental y básico, como el derecho de presunción de inocencia.
Ahora resulta que el ministro que aprobó la Ley de Violencia de Género, ha sido acusado de maltrato por su expareja...(físicos y psíquicos por lo que se ve)
Si es verdad, divertida la hipocresía de la progresía verbenera que en los debates y cafés lloriquean la presunción de inocencia, después de que él y sus palmeros nos han robado a los demás la presunción de inocencia. Y lo siento, pero mi presunción de inocencia es sacrosanta. O debería serla. Porque parece ser que no. En cambio él, que ha robado la presunción de inocencia a los demás, sí tiene que tenerla (¡manda huevos!).
Resulta que está aforado, y ningún otro ciudadano tendría los privilegios que él tiene. Cualquier otro ciudadano estaría ya en la cárcel o casi.
Y si fuera mentira la pena es no que no fuera tratado como su ley obliga a cumplir (sufrir) a los demás ciudadanos (nos, no nas).
Y entre tanto nos podemos entretener con lloros y lloriqueos en los debates, cafeses y demás circos televisivos, arradios y otros lugares de encuentro y reunión de progresistas, hipócritas y charlatanes de feria.
A mamarla...a Parla.
