LA CONDENA, 15 MESES DE CÁRCEL
Condenados los refugiados que violaron a una activista sueca pro-inmigracion
Dos demandantes de asilo afganos de 18 años de edad han recibido condenas muy laxas por la brutal violación a una mujer en una localidad sueca.
La agresión se produjo el año pasado, cuando Anwar Hassani y Fardi Hesari conocieron a una mujer de unos 40 años a la entrada de un bar en la localidad sueca de Ljungby. Según publica el Daily Mail, la víctima se interesó por los dos afganos y su situación, ya que ella forma parte de un grupo de activistas pro-inmigración. Quería saber cuáles eran sus inquietudes, cómo habían llegado hasta Suecia, si trabajaban, estudiaban…
El trío estaba disfrutando y en ese momento, alrededor de las 3:30 de la mañana, los jóvenes afganos invitaron a la mujer a tomar una última copa en el centro de refugiados en el que residían. Se desplazaron hasta el lugar y subieron a la habitación, donde estuvieron bebiendo y fumando.
Es entonces cuando la víctima, en estado de embriaguez, se marea y se tira al suelo. Uno de los jóvenes -Anwar- en lugar de ayudarle, empieza a molestarle y realizarle tocamientos. La víctima le indica que no quiere nada y, en lugar de parar, el afgano le baja los pantalones y la viola. La mujer grita y Hassani le tapa la boca mientras le indica que se esté callada.
Cuando termina de violarla le pregunta por qué accedió a acudir con ellos si no quería tener sexo. Según declaró más tarde a la Policía el otro afgano implicado, Anwar le preguntó en un dialecto árabe: ‘’¿Es que no vas a violarla?’’.
La agresión se produjo el año pasado, cuando Anwar Hassani y Fardi Hesari conocieron a una mujer de unos 40 años a la entrada de un bar en la localidad sueca de Ljungby. Según publica el Daily Mail, la víctima se interesó por los dos afganos y su situación, ya que ella forma parte de un grupo de activistas pro-inmigración. Quería saber cuáles eran sus inquietudes, cómo habían llegado hasta Suecia, si trabajaban, estudiaban…
El trío estaba disfrutando y en ese momento, alrededor de las 3:30 de la mañana, los jóvenes afganos invitaron a la mujer a tomar una última copa en el centro de refugiados en el que residían. Se desplazaron hasta el lugar y subieron a la habitación, donde estuvieron bebiendo y fumando.
Es entonces cuando la víctima, en estado de embriaguez, se marea y se tira al suelo. Uno de los jóvenes -Anwar- en lugar de ayudarle, empieza a molestarle y realizarle tocamientos. La víctima le indica que no quiere nada y, en lugar de parar, el afgano le baja los pantalones y la viola. La mujer grita y Hassani le tapa la boca mientras le indica que se esté callada.
Cuando termina de violarla le pregunta por qué accedió a acudir con ellos si no quería tener sexo. Según declaró más tarde a la Policía el otro afgano implicado, Anwar le preguntó en un dialecto árabe: ‘’¿Es que no vas a violarla?’’.
Condenas ridículas
Si bien Fardi no llegó a violar a la mujer, sí abusó de ella mientras se masturbaba ante tal grotesca escena. La agresión no terminó hasta que la víctima gritó de dolor cuando intentaron sodomizarla. La mujer logró huir y pudo llamar a una ambulancia, que la trasladó hasta el hospital más cercano. Según Daily Mail, los sanitarios que atendieron a la víctima recuerdan que presentaba ‘’un fuerte estado de ansiedad’’.
Esta semana se ha celebrado el juicio en la Corte del distrito de Växjö y ambos han sido condenados. Las penas impuestas son ridículas: 15 meses de prisión por violación y algo más de once mil libras para Anwar; y a Fardi le han sido impuestos tres meses de cárcel y dos mil libras de indemnización. El primero será expulsado de Suecia y no podrá volver en diez años en cuanto cumpla la condena.
Fuente: La Gaceta