Varias decenas de vecinos de Premià de Mar (Barcelona) asaltaron un piso ocupado por «jóvenes migrantes» (como le llaman los medios de izquierdas a los MENAS), a los que trataron de desalojar a pedradas contra la fachada de una vivienda.
La escena es una más que retrata el hartazgo de ciudadanos españoles que ven cómo con el dinero de sus impuestos se alienta la okupación de viviendas con total de impunidad.
Con el estado de alarma a punto de llegar a su fin en casi todo el país, los MENAS han vuelto a asaltar viviendas y a aterrorizar a vecinos de Premià de Mar, Sevilla, Bilbao o barrios madrileños como Hortaleza, Batán y Colmenar de Oreja.
Es tal el miedo y el cansancio con estos «jóvenes migrantes», siempre mirados con comprensión y cariño por la izquierda, que los vecinos se han visto obligados a organizar patrullas vecinales para proteger a sus hijos de robos y violaciones.
En laSexta, el periodista Manuel Marlasca en ‘Más Vale Tarde’ explicaba lo sucedido en Premià de Mar al mejor estilo orwelliano: las imágenes (grabadas por un vecino) mostraban una cosa y él contaba otra muy diferente.
En las imágenes se puede ver a los okupas ser introducidos en un coche de la Policía envueltos en una bandera de Argelia, detalle que no tuvo importancia para el periodista ya que ni lo mencionó.
Un rótulo también daba alguna clave: «Dos detenidos por el asalto a un piso ocupado (sin K) de jóvenes inmigrantes en Premiá de Mar».
Pero la reportera Dayana García lo corregía y hablaba de ‘jóvenes migrantes’ como marca la Real Academia de la Neolengua. Migrante suena mejor que MENA.
Y enseguida vino la advertencia del periodista a modo de homilía: «¿Protestas? Legítimas, otra cosa es tomarse la justicia por su mano. Esa ley del talión que afortunadamente en un Estado de Derecho como el español no vale».
Nueva pieza informativa, esta vez, locutada. Ninguna referencia a la nacionalidad de los ‘migrantes’ salvo un rótulo que aparece fugazmente: ‘okupas magrebíes’.
Nos informa laSexta también que los okupas han sido los que más suerte han tenido porque se los han llevados a un albergue mientras que a los vecinos que protestaban les han detenido por atentado, desobediencia y delito de odio y discriminación.
Da mucha tranquilidad vivir en un Estado de Derecho como el que hacía referencia Marlasca en el que los okupas acaban en libertad tras asaltar una vivienda y los detenidos son dos vecinos por delito de odio.
Tampoco hubo mención a que el ataque de medio centenar de vecinos era la reacción «a un intento de agresión sexual a una chica el miércoles pasado», según ha explicado el alcalde del municipio, Miquel Àngel Méndez. No vaya a ser que enfademos a las feministas.
El alcalde lo resumió muy bien: «No es racismo sino una reacción a la delincuencia que no entiende de razas».
La escena es una más que retrata el hartazgo de ciudadanos españoles que ven cómo con el dinero de sus impuestos se alienta la okupación de viviendas con total de impunidad.
Con el estado de alarma a punto de llegar a su fin en casi todo el país, los MENAS han vuelto a asaltar viviendas y a aterrorizar a vecinos de Premià de Mar, Sevilla, Bilbao o barrios madrileños como Hortaleza, Batán y Colmenar de Oreja.
Es tal el miedo y el cansancio con estos «jóvenes migrantes», siempre mirados con comprensión y cariño por la izquierda, que los vecinos se han visto obligados a organizar patrullas vecinales para proteger a sus hijos de robos y violaciones.
En laSexta, el periodista Manuel Marlasca en ‘Más Vale Tarde’ explicaba lo sucedido en Premià de Mar al mejor estilo orwelliano: las imágenes (grabadas por un vecino) mostraban una cosa y él contaba otra muy diferente.
En las imágenes se puede ver a los okupas ser introducidos en un coche de la Policía envueltos en una bandera de Argelia, detalle que no tuvo importancia para el periodista ya que ni lo mencionó.
Un rótulo también daba alguna clave: «Dos detenidos por el asalto a un piso ocupado (sin K) de jóvenes inmigrantes en Premiá de Mar».
Pero la reportera Dayana García lo corregía y hablaba de ‘jóvenes migrantes’ como marca la Real Academia de la Neolengua. Migrante suena mejor que MENA.
Y enseguida vino la advertencia del periodista a modo de homilía: «¿Protestas? Legítimas, otra cosa es tomarse la justicia por su mano. Esa ley del talión que afortunadamente en un Estado de Derecho como el español no vale».
Nueva pieza informativa, esta vez, locutada. Ninguna referencia a la nacionalidad de los ‘migrantes’ salvo un rótulo que aparece fugazmente: ‘okupas magrebíes’.
Nos informa laSexta también que los okupas han sido los que más suerte han tenido porque se los han llevados a un albergue mientras que a los vecinos que protestaban les han detenido por atentado, desobediencia y delito de odio y discriminación.
Da mucha tranquilidad vivir en un Estado de Derecho como el que hacía referencia Marlasca en el que los okupas acaban en libertad tras asaltar una vivienda y los detenidos son dos vecinos por delito de odio.
Tampoco hubo mención a que el ataque de medio centenar de vecinos era la reacción «a un intento de agresión sexual a una chica el miércoles pasado», según ha explicado el alcalde del municipio, Miquel Àngel Méndez. No vaya a ser que enfademos a las feministas.
El alcalde lo resumió muy bien: «No es racismo sino una reacción a la delincuencia que no entiende de razas».
Fuente: Periodista Digital
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