Hace años se relacionó a la “yihad” con muchos de los incendios forestales que están teniendo lugar en suelo europeo. Los autores de establecer la relación fueron descalificados pese a las abultadas evidencias.
Dos agentes de la estación forestal de Ostia detuvieron ayer a un pirómano en los pinares de Castelfusano, en el sur de Roma. Se trata de un iraquí de 36 años, que reside legalmente en Italia. Fueron encontrados en su poder materiales incendiarios para propagar el fuego y causar el mayor daño posible. Se le acusa de incendiar un bosque de pinos. La Policía investiga su posible participación en otros incendios.
Italia arde este verano como consecuencia de los incendios forestales. Sólo en el sur de Italia se han registrado ya una veintena de incendios que han obligado a desalojar diversas localidades turísticas de Sicilia y a poner en guardia a las autoridades de Nápoles, que investigan las causas del fuego que desde hace días está arrasando los alrededores del Parque Nacional del volcán del Vesubio.
La Fiscalía de Torre Annunciata ha abierto una investigación para determinar el origen del fuego pero las autoridades italianas no tienen dudas de que los incendios han sido provocados.
Sólo el pasado lunes se detectaron más de un millar de focos de incendios en Italia. El mayor número de ellos se produjo en Lazio donde los bomberos realizaron 280 operaciones, seguido por Campania con 250, la Toscana con 150, Calabria con 110 y Apulia con 100.
Sólo el pasado lunes se detectaron más de un millar de focos de incendios en Italia. El mayor número de ellos se produjo en Lazio donde los bomberos realizaron 280 operaciones, seguido por Campania con 250, la Toscana con 150, Calabria con 110 y Apulia con 100.
“La situación es muy grave. No debemos dejar sola a Roma ante este desastre medioambiental”, afirmó la alcaldesa romana Virginia Raggi durante una visita a la zona devastada por las llamas.
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